jueves, abril 09, 2009

Compra - Venta... usté ofrezca

Venía metido en la esquizofrenia, intentando crear nuevas palabras con acepciones polimórficas / palíndricas cuando, de la nada, aparece junto a mi un vendedor de caballos de dos cabezas.

¡Mírelos, qué bonitos son! Se los vendo a dólar cada uno - Me dijo.

Eran 4, y realmente bellos, con los dientes muy limpios; pero pues no había cambiado dinero. Es más, no traía mas que pelusa en los bolsillos.

Oiga, y el caballo más pequeño ¿por qué no tiene patas? –Pregunté.

Ah, es que ese es un caballo barrilito.