Cosas que no debes soñar

No debes soñar barcos explosivos
agua transparente
canoas con volante
serpientes delgadas y verdes como tallos de apio
no debes prepararte clamatos en tus sueños.

Y sobre todo, no escarbes en las montañas
ni alimentes a los colibríes.

Castillos en el aigre

El rey era un monstruo de piedra.... con el corazo-o-o-ón de piedra.

Su castillo había caído del aire donde se empedaba con su vieja que tras un forsozo aterrizaje compuso una canción muy chida que cantaba a gritos.

Abajo, en un mercado, el rey vendía trozos de su castillo. La gente le pagaba con animales que encontraban en las calles y que aquél rey desconocía. Nunca había oído ladrar un perro, así que los tenía por finos caballos. Las garrapatas que le llevaban los niños eran ardillas, los pollos eran para él pejelagartos. Total, al final del año montó un circo de animales exóticos.

La gente hacía filas enormes (como las del puente libre) para entrar a su circo. Y al final de las funciones, la muchedumbre malhumorada y decepcionada de sólo ver animales callejeros comunes; le arrojaban piedras al sangrante rey, quien agradecido edificó de nuevo con esas duras rocas otro castillo y encendiendo los motores tomó a su mujer y despegó de ésta tierra para siempre.

La bella comprante

Ella vio en el aparador un hermoso vestido
e intentó comprarlo.
Pagaba muchos billetes en la tienda.

Pero era ella tan hermosa que el vestido, celoso, aumentaba su precio.
Era en verdad negro el vestido.
Parecía de encaje.

Cada semana M pagaba un hilo de la prenda
y cada día el vestido aumentaba su volúmen.

Desesperada arrancó un sábado al vestido del aparador;
se lo puso y danzó con todos los muchachos que salieron a su paso,
jugó playstation 2 con sus mejores amigos;
que no pudieron ganarle por estar contemplando su belleza o porque anhelaban ponerse su vestido.

Era en verdad hipnotizante la tela ceñida a ella.
Con tinta blanca M dibujó un violín sobre su cuerpo.

Crimen y castigo-go go, vampiro go !

La paloma murió porque tenía mala suerte
no porque la atropellé.

Tuvo mala suerte la paloma, por eso la atropellé.

Las palomas muertas le traen mala suerte a un auto atropellador.

Para atropellar a una paloma se necesita mala suerte.

Mueren atropelladas las palomas malasuerteras.

A paloma muerta rechinidos sordos.

¿Atropello a una paloma para tener mala suerte?

¿Hay suerte mala en la paloma atropellada?